jueves, 7 de agosto de 2014

Tsonkuakualotl de por vida

Mark Allen, campeón triatleta de los 80s y 90s, dice muy claramente lo que sucede cuando renuncias a tus metas:

“Puedes continuar para terminar la carrera y las piernas te dolerán por una semana, o puedes renunciar y tu mente te dolerá por toda la vida”

Yo me pregunto ¿a cuántos les duele la cabeza de por vida? Podría asegurar que al 95% de las personas. Lo más curioso y, al mismo tiempo, lo peor de todo es que la dolencia seguramente no obedece a una renuncia, sino a la renuncia diaria a tantas oportunidades que se ven pasar y en la lejanía se pierden.

¿Cómo es tu dolor de cabeza?

sábado, 2 de agosto de 2014

La lagartija a la tlamiktia de la tlauili roja

Mirada fija, quietud total. Posición relajada y expectativa total. ¿Qué es?

Tras indagar un poco y encontrarle “la cuadratura al círculo”, la respuesta llegó de forma inmediata: ¡una pequeña lagartija ubicada en la esquina de la habitación!

Tenía a mi alcance un apuntador láser y lo prendí para intentar hacer que se moviera la lagartija. Apunté directamente sobre los ojos y no hubo movimiento alguno (pensé que quedaría “deslumbrada”). No obstante la respuesta fue inesperada: moví lentamente el apuntador y la lagartija empezó a seguirlo. Hice un movimiento más rápido y la lagartija aceleró su paso. ¡Y la diversión dio inicio!

Tras hacer varias figuras imaginarias con el apuntador láser y con una mascota instantánea siguiéndolo por toda la pared (mi esposa quiso tomar foto pero no fue posible), la lagartija se detuvo. Ya no siguió el apuntador. Sospecho que se dio cuenta de que era un juego y nada bueno iba a obtener. Intenté varias veces hacer que siguiera el láser del apuntador y no hubo respuesta. La diversión había terminado.

¡Y la lagartija no se movió hasta que la perseguí por toda la habitación!

A veces perdemos el sentido de la diversión con lo más insignificante (aunque haya un apuntador láser), nuestro estrés nos hace olvidar que podemos divertirnos con casi nada. Debemos tratar de retomar, y posiblemente de desarrollar nuevamente, esa capacidad. La naturaleza nos ofrece todo, pero con la tecnología en mano nos perdemos y olvidamos. Valoremos los instantes de la diversión a la antigua.

viernes, 1 de agosto de 2014

Filas preferentes

Siempre he pensado que las filas preferentes que tienen algunos bancos, deben servir para la gente de la tercera edad, mujeres embarazadas y personas que desafortunadamente tienen alguna enfermedad o problema físico.

No obstante, dichas filas las ocupan los empresaurios que según no tienen tiempo de formarse porque sus negocios son muy importantes. Seguramente a muchos les ha tocado que la fila es enorme y llegan estas personas a la fila preferente y en 5 minutos salen, mientras uno se queda hasta una hora formado.

Para mi sorpresa el día de hoy, en uno de los bancos que más atiende empresaurios, observé que la fila preferente está dedicada a lo que debe ser. Ojalá fuera así en todas las sucursales de ese banco y por supuesto que también se corrija en todos los demás bancos que trabajan con esa idea.

lunes, 7 de julio de 2014

Azar y destino

[Dice una historia que una mujer checa se casó con un alemán. A través de contar sus antecedentes el uno al otro, se dan cuenta que el padre de ambos, quien había desaparecido en la segunda guerra mundial, es la misma persona.

Otra historia cuenta que una madre llevó a su hijo ante el astrólogo para saber su futuro y destino. Tras examinar las líneas de las palmas de la mano, el astrólogo le dijo que su hijo no tenía un futuro, que iba a ser un don nadie. La madre ante tal preocupación tomó una piedra afilada y trazó nuevas líneas en la palma de su hijo, para ir nuevamente con el astrólogo a preguntarle su futuro. La historia no dice qué dijo el astrólogo, pero ese niño llegó a ser un genio de la gramática. Su nombre era Panini.

Una historia más dice que unos amigos, hombre y mujer, viendo fotos del recuerdo, se sorprendieron al ver que una foto tomada en un viaje al extranjero que ella hizo años atrás, había captado sin querer a su amigo. En aquel entonces no se conocían.]*

¿Cuántas veces nos cuestionamos acerca de lo que sucede con el azar, con el destino y hasta incluso si es posible o no cambiar el resultado de lo que se observa es inminente? ¿Casualidad o causalidad? Siempre he dicho que todo es causal, todo lo generamos nosotros, todo está dispuesto para tomar las mejores decisiones y esa toma de decisiones es nuestro destino.

Insistentemente siempre he dicho que todo tiene un precio, el precio de Ser, Hacer y Tener. El orden es importante y es inviolable. Tras de ello, la toma de decisiones por las oportunidades que tenemos genera el resultado menos esperado de nuestras vidas. Ser consciente de ello nos hace tomar mejores decisiones y tener los mejores resultados.

¿Cuentas con la consciencia lo suficientemente despierta
para tomar las mejores decisiones?


* Basado en El Cuaderno Verde de José Gordon.

sábado, 14 de junio de 2014

¿Bases de datos o relajo de datos?

Se supone que las bases de datos fueron creadas para simplificar la vida al utilizar millones de datos que sin ellas sería imposible hacer algo. Las consultas que se hacen arrojarán siempre los mismos resultados, excepto que haya cambios en los datos. También existe algo que se llama reporte y que al igual que las consultas, reflejan lo mismo si los datos no cambian. Hablando de reportes, si se observa que aparecen datos duplicados, es de esperarse que tras la corrección, el problema se corrija.

Pues bien, resulta que en un lugar X, los reportes R1, R2, R3 y R4 mostraban información repetida a partir de la misma consulta Q. El administrador fue notificado de la inconsistencia observando el R1. Si todo en la base de datos está bien diseñado, es de esperarse que R2, R3 y R4 se corrijan automáticamente. Lo interesante de esto es que la persona que reportó el problema en R1, era la única que tras la corrección veía todo bien, mientras que R2, R3 y R4 seguían teniendo datos repetidos.

Yo me pregunto: ¿acaso no en una base de datos, en la que al corregir los datos, todos los que la utilizan deberían ver lo mismo? ¿Será que cada reporte hace uso de consultas repetidas y accede de diferente forma a la base de datos? ¿Será que aún persisten los esquemas de tablas planas? ¿Será que los administradores no son en realidad administradores? ¿Será que ya de plano la flojera es tan fuerte y al extremo?

No entiendo, pero así funcionamos… ¡¡¡de milagro!!!

domingo, 8 de junio de 2014

La crítica

En muchas ocasiones se ha perdido el sentido verdadero de esta palabra que en realidad debería permitir referirnos a un examen o juicio público sobre algo o alguien. Desafortunadamente, este concepto está asociado a las personas que hablan de forma privada con afectación, que murmuran o que censuran, y que incluso llegan a la reprobación.

Algunos sectores de la sociedad se refieren a las cosas buenas o malas que esta palabra encierra, llegando a decir que hacen una crítica positiva (constructiva) o una crítica negativa (destructiva). Si bien las descripciones encontradas en el RAE permiten distinguir lo positivo o negativo de la crítica, lo acorde es hacer un juicio público, donde la gente o cosa involucrada tiene la oportunidad de una réplica.

Así es. La crítica debe ser pública o de lo contrario entramos en el terreno de afectar a alguien o algo. La crítica es simplemente eso, una crítica, no un medio de destrucción que dista mucho incluso de ser crítica. Por consecuencia, si se hace una crítica frente a la persona involucrada, se tendrá la oportunidad de retroalimentar, de intercambiar, de dialogar. La crítica se hace de frente y entonces llegamos a un juicio correcto. Si la crítica se hace a espaldas, entonces censuramos y la comunicación se pierde.

Partiendo del dicho que dice “Trata a los demás como quieras que te traten”, entonces no critiques para que no te critiquen, no afectes a otros para que no te afecten. Y si quieres tener la oportunidad de defenderte, que tu crítica sea pública y frente a las personas correctas.

jueves, 29 de mayo de 2014

Lo inevitable y lo imperdonable

“Sólo hay dos cosas que podemos perder: el tiempo y la vida.
La segunda es inevitable, la primera es imperdonable”

La segunda, la vida, no tenemos absolutamente ningún tipo de garantía que nos diga que somos eternos, si acaso podemos decir que unos son más longevos que otros. Podemos tan solo trascender y eso implica vivir en el presente, aprovechar el tiempo.

La primera, el tiempo, tenemos la responsabilidad de aprovechar cada instante de nuestra vida, simplemente en vivir, tan solo en hacer lo que tenemos qué hacer. ¿Acaso es pedir mucho? Insisto, solo haz lo que tienes que hacer. Sólo atiende tu interior. Sé feliz. Llega a casa, deja de estar de vago (casa es Uno, lo de vago es atender lo que no se debe, lo de otros).

Ante lo inevitable, simplemente hay que prepararse porque no sabemos el momento. Ante lo imperdonable, simplemente es autoconocerse y tienes TODO el tiempo antes de lo inevitable.

sábado, 29 de marzo de 2014

Soledad: tu propia naturaleza

“La soledad es una flor, un loto que florece en tu corazón.
La soledad es positiva, la soledad es salud.
Es la alegría de ser tú mismo, de tener tu propio espacio.”

– Osho –

NO, no se trata de que vivas sin nadie, no se trata de que te aísles en el lugar más recóndito del planeta. Se trata de que viajes a tu interior y te conozcas, así de simple.

Conocerte a ti mismo te permite liberarte de muchas cadenas, por eso adquieres salud, alegría y ser tan amplio como quieras. Definitivamente en ese viaje interior, nadie puede acompañarte, por eso la parte de soledad. Tu propio encuentro refleja la Razón de Ser. Y este viaje requiere de mucho valor.

¿Y por qué valor? Porque la sociedad (incluyendo religión y política) siempre nos marca. A la sociedad le interesa la personalidad. La sociedad te forma como en la lucha libre: con máscara y dirigida por otros. La marca de la sociedad es tan profunda que en cada eslabón se ata el miedo y la ansiedad. Romper con todo eso requiere valor para dejar fluir la intuición y ser lo que debemos ser: individuos.

A casi tres años de haber escrito la entrada de Tlamakitilistli: soledad existencial, retomo parte de ello para complementar lo que significa vivir en soledad.

¡Aprende a ser libre!

domingo, 23 de marzo de 2014

Axkankayotl: el eterno viaje por el tiempo

Tiempo, el tiempo, los tiempos, las épocas, el momento, los instantes… dile como quieras, el tiempo es el tiempo y siempre estará presente.

Científicamente, el tiempo es la cuarta dimensión. La teoría de cuerdas lo presume como una sola dimensión. La humanidad lo ve como un algo que pasa y pasa, y se va. Los niños lo disfrutan al máximo. Los adultos lo persiguen. Algunos cuantos adultos mayores, tal vez muy mayores, lo comprenden.

Según las formidables explicaciones de Brian Greene acerca de cómo las cuerdas tienen comprimidas 6 dimensiones espaciales, resulta tan fácil ver cómo viajamos a través del tiempo.

Veamos. Cuando observamos en la lejanía un cable de luz, simplemente vemos una línea plana. Conforme nos acercamos, nos damos cuenta que es incluso un conjunto de cables enroscados y que tiene cierto espesor. Así de fácil se perciben las dimensiones comprimidas en la teoría de cuerdas. Ahora, si hablamos de nuestro espacio tridimensional, veremos que si le quitamos la tercera dimensión, todo se hace un plano donde evidentemente no hay “arriba” ni “abajo”. Sólo podemos ver a la izquierda, a la derecha, la frente y atrás. Si ahora quitamos la segunda dimensión, sólo tenemos el frente y atrás, todo en una línea. En una sola dimensión, como no podemos voltear, simplemente miramos al frente, donde lo único que vemos es al de adelante y por consecuencia no percibimos a nadie más.

Si el tiempo es una sola dimensión, pasa exactamente lo que con la línea, sólo avanzamos al frente. Por lo tanto, si el tiempo es una línea, sólo avanzamos al frente, no hay paso atrás; si el tiempo es una línea, nosotros somos los que pasamos a lo largo de dicha línea, pero el tiempo está siempre presente a lo largo de su dimensión.

El tiempo está siempre allí, no permite nada más que transportarnos en su interior, siempre hacia adelante. Así es, nosotros somos los que pasamos a través del tiempo. Cuando “dejas pasar el tiempo” en realidad “el tiempo te deja pasar sin actividad alguna”.

Si el tiempo tuviese dos dimensiones, entonces, podemos regresar a un punto en el plano-tiempo y volver a recorrerlo. Mientras la teoría de cuerdas, la teoría M, la teoría de los multiversos no tengan más elementos para ver si tenemos o no una dimensión más del tiempo, sólo podremos viajar hacia adelante en la línea del tiempo con nuestro Axkankayotl.

sábado, 22 de marzo de 2014

Empresas sin ixkomakayotl

Las grandes empresas, aquellas que cotizan hasta en bolsa de valores, las que tienen un capital adecuado para satisfacer al cliente en el más mínimo detalle, aquellas que presumen hasta de una responsabilidad social, las que sabemos que pase lo que pase seguirán existiendo por muchos años. Sí, las que incluso son monopolios aunque digan que no y hasta forman sus fundaciones.

Esas empresas se jactan de tener un magnífico sistema de facturación y atención telefónica cuando en realidad les falta mucho para ser cierto. Cuando no les falla el sistema de facturación, la atención telefónica es un desastre.

Ponen correos para comunicarse y a los 5 minutos obtenemos una respuesta de que el correo no es válido. ¿Entonces dónde está su compromiso con los clientes? Ponen números de atención telefónica y sus extensiones no son válidas o simplemente la grabación dice: “adiós”. ¿Entonces para qué tanta modernidad si a fin de cuentas no se puede uno comunicar?

Y muchas de esas empresas ponen el soporte de Visa o MasterCard en general, y resulta que entre sus opciones solo soportan un banco X con una tarjeta Y o Z. Y cuando se les dice que por qué es su sistema así de cuadrado, simplemente le dicen a uno: “puede ir a pagar en efectivo a un banco o vaya con el Oxxo de su preferencia”. Vaya esquema cerrado.

No me explico tanta modernidad y tan poco compromiso.