viernes, 2 de marzo de 2018

La risa del pequeño Equus Ferus

El pequeño Equus Ferus va y viene por todos lados. Es tremendo. Es capaz de subir a las alturas de manera perfecta, incluso sin que nadie se entere, porque es un escalador por excelencia. Su galopar lo destaca como único en el mundo. Este caballito tiene muchas cosas interesantes, pero lo más espectacular es su risa. Sí, su risa tiende a ser contagiosa, se ríe muchas veces al día y con gran alegría.

Pero cuidado porque… ¡el caballito tiene sus ratos de enojo! Si algo no le gusta evidentemente se sabe porque tira patadas sin ton ni son, hacia donde sea, no importa quién esté, la hora es irrelevante… simplemente arrasa con lo que esté a sus alrededores. Después de todo, todo se compone porque es una llama de ternura.

Tap, tap, tap, tap… se escucha a lo lejos, tap, tap, tap, tap, se escucha cerca, tap, tap, tap, tap, y se deja oír la sonrisa...

...y un ¡traca, traca, traca, traca!