martes, 19 de febrero de 2013

Los pésimos y deplorables bancos y sus absurdos sistemas de cobro

El teléfono suena…

- ¿Bueno?
- ¿Se encuentra el Sr. X (o Sra. Y)?
- No, es número equivocado.
- ¿Usted lo conoce?
- No.
- ¿Tiene referencias de él (o ella)?
- No, no, no sé quién sea.
- ¿Sabe si vivió allí?
- Le repito que no sé nada, mi línea es nueva, no tengo antecedentes de nada ni de nadie.
- ¿Sabe dónde localizarlo(a)?
- ¿Acaso están orates, tontos? ¿No entiende lo que es no sé nada?
- Entonces tiene que hablar al número 1234567890 para que cancelen de su número la búsqueda de esta persona.
- …


Y entonces sucede que tras tantas llamadas y reclamaciones y gritoneadas y rayadas y mentadas e insultos y dimes y diretes… el teléfono sigue sonando, preguntando por la misma persona, tratando de ver si el banco en uno de esos intentos, falla la "concentrancia" y pueden localizar al que se está ocultando y no quiere pagar, o que en el mejor de los casos se responda milagrosamente: "¡soooy yo!".

Gracias a la tecnología de teléfonos, el identificador de llamadas es efectivo y podemos “filtrar” las llamadas, saber a quién le contestamos y a quien no. Pero si alguno de ustedes se han encontrado con este pequeño problemita, algunas soluciones interesantes que pueden ser divertidas van desde grabaciones, alteraciones voz, hacer que como que no se oye, etc. Pero yo creo que algo que verdaderamente es fantástico es el siguiente caso:


¡Ya saben qué hacer!

miércoles, 6 de febrero de 2013

Los primeros atsans dentro del templo

Desde que dio inicio el nuevo mundo, he caminado en el interior del templo. Su majestuosidad sigue siendo como tal: indescriptible pero lleno de fascinación. He aprendido que cada paso debe ser seguro, que el tiempo se debe asimilar como atemporal para ser eterno, que cada detalle que se comparte debe estar en sintonía con el ágape y que cada instante es único.

Observo que el templo crece. Uno nunca se imagina o considera que esto es posible, más sin embargo descubro que soy un arquitecto dentro del templo. Su edificación es un reto acompañado de innumerables opciones, las cuales bajo el principio del compartir y del ágape construyen automáticamente cada pilar requerido.

Ha llegado la hora de la adoración. Ha llegado el momento de preservar el fuego. Es hora de ascender un poco más en la escalera del Ser. Y todo en lo increíble del Axkankayotl.

martes, 5 de febrero de 2013

Mandelbrot en 3D

Alguna vez hice un trabajo sobre el conjunto de Mandelbrot. Siempre obtuve imágenes en dos dimensiones, obtuve algunas muestras de efectos (degradado en los bordes) para simular tres dimensiones y algunas otras en proyecciones tridimensionales (efectos reales).

No obstante, por rebote de andar buscando algunas cosas de la teoría del caos, me encontré una representación efectiva en tres dimensiones de este maravilloso conjunto. Les dejo el espectacular video para que lo vean.

lunes, 4 de febrero de 2013

Amatlakuilolis inteligentes detrás del Reggaeton

Escuchando sin querer un poco de este ritmo musical que en general no es de mí agrado, noté un par de piezas que mandan un mensaje interesante. Una de ellas dice que es preferible hablar con una persona que perderse en el iPad, es mejor ver una sonrisa que chatear mediante un celular. La otra pieza habla del Facebook, y menciona que de nada sirve miles de contactos en la red si sólo conoces a diez personas en la vida real.

Los mensajes son bastante interesantes y, aunque casi no le pongo atención a lo que escucho de este ritmo, me pareció que hay gente que aprovecha la inercia de la música para hacer notar que cada vez estamos más perdidos en la tecnología. Y la verdad no es que la tecnología sea mala, pasa que no sabemos utilizarla, y me refiero que no somos conscientes de que hay que aprovecharla de forma eficiente.

Por enésima vez, repito lo mismo:
somos esclavos de la tecnología.

Bien por esas canciones que tratan de mantenernos en la realidad, aunque seamos necios en no hacer caso. Sólo espero que reacciones a tiempo y no cuando tengas enfermedades que por un mal uso de tecnología tengas que estar ciego, con problemas nerviosos crónico-degenerativos o incluso quemado (por aquello de poner una portátil sobre las piernas, que ya ocurrieron varios casos), o algún otro problema parecido.

domingo, 3 de febrero de 2013

Internet versus localidad

Si Internet garantiza un acceso las 24 horas del día los 365 días del año, es de esperarse que los servicios de cualquier organización estén disponibles bajo las mismas condiciones. Si pensamos en que uno puede viajar a cualquier parte del mundo, donde los horarios desde luego son diversos según el país donde uno esté, resulta que el acceso a determinados recursos en línea están limitados por el horario local. ¿No es esto una completa incongruencia?

Pues sí, algunas instituciones bancarias y otras de servicios de telefonía mexicana (especialmente aquella que domina en México y que presume de que éste es su territorio), y muchas otras instituciones tienen restricciones de horario. Entonces podemos decir que de nada sirve tanta tecnología y presunciones de globalización por la simple y sencilla razón de que todo funciona en forma y horario local. ¿Y si estoy trabajando un par de semanas en Asia o Europa? No puedo hacer movimientos en el horario que requiera porque nada funciona las 24 horas.

Estoy de acuerdo en que hay “ventanas” de mantenimiento y desde luego que hay que actualizar lo necesario, pero para eso se ponen advertencias. Pero la realidad es que hay muchos descuidos y los supuestos administradores sospechosamente, creo que administran su pereza, su negligencia y su descuido. Hasta no saben que tienen fallas y creen que todo marcha sobre ruedas (no me hagan caso, es mi locura de siempre).

sábado, 2 de febrero de 2013

Todo es opcional

Cada una de las decisiones que se toman en la vida es opcional. Si una opción es algo por lo que se puede optar en completa libertad o con facultad de elegir, entonces se debería de seleccionar siempre la mejor opción. No obstante, pareciera que siempre hay una amenaza y se hace todo lo contrario.

¡Todo es opcional en esta vida y nada es obligatorio!

Esto una forma muy compacta de decir que cada una de las decisiones que se toman en la vida tiene un precio. Y por enésima vez, va de nuevo: dicho precio es el precio de Ser, Hacer y Tener… Y siempre será en ese orden.

El Ser, conformado por lo que define a una persona en su forma interna y con sus valores, lleva siempre a Hacer cosas que son permisibles por dichos valores, cuyas consecuencias forman lo que se Tiene. Y para ser más claros, hay una frase popular que dice: “Lo que siembras es lo que cosechas”.

El ser se fortalece con la eliminación de los egos que ciegan la vida diaria. Todo está en ti y de ti depende la selección de esas opciones.

viernes, 1 de febrero de 2013

Masasiuilistli tecnológica

La reunión se llevó a cabo con lo acostumbrado: llegadas tarde y haciendo todo menos lo que se debió. A parte de la pereza mental de hacer cosas colaborativas, el desinterés inundaba el ambiente.

En este contexto descrito muy brevemente, observé una vez más lo que ya es común en muchos lugares. Prácticamente todos los presentes en forma robotizada atendiendo sus teléfonos inteligentes (que por cierto, de inteligentes no tienen nada), mostrando explícitamente su esclavitud ante la tecnología móvil.

Creo que si bien la tecnología es un apoyo muy grande en muchas cosas, cada vez es más el encierro de una persona en su celular, tableta o cualquier otro dispositivo similar. Es verdaderamente increíble cómo nos perdemos en esa inmensidad de tecnología que aparte de estresarnos nos deja ciegos, sordos y hasta sin cerebro. Es inconcebible cómo al establecer un diálogo, no pasan ni 5 minutos y la otra persona está atenta a su teléfono celular que le notifica a cada instante que ya le llegó un nuevo correo, que hay una nueva entrada en alguna de sus múltiples redes sociales, que tiene un nuevo mensaje de alguno de sus contactos, que el clima ya cambió en no sé qué parte del país, que hubo un acontecimiento en alguna parte del mundo, que hay un nuevo chiste circulando en la red, que nuestro presidente excelentemente iletrado ya la volvió a regar, entre muchas cosas de notificación (el 99% son cosas sin sentido).

Yo sigo en mi rebeldía y antipatía por el chisme de las redes sociales y sus estrategias de notificación. Desde luego que estoy en redes sociales, pero no para chisme, sino para difundir cosas que son de interés para aprender, ser conscientes, retroalimentarme, etc. Algunos tal vez consideren que este blog es parte de lo que me quejo, y seguramente tienen razón, pero al menos trato de que haya algo diferente, no seguir en la corriente sin sentido.

Atrévete a romper con la esclavitud tecnológica, usa las cosas para lo que realmente son, no para que te pierdas en un mundo basura.

¡Aprende a ser más libre
utilizando correctamente la tecnología!