jueves, 31 de diciembre de 2009

Lo mejor del año

A lo largo del año ocurrieron una serie de sucesos bastante satisfactorios y confortables, de aquellos que dejan gran sabor de boca y cuyo significado se traduce simplemente en que las cosas hay que seguirlas haciendo como hasta ahora y si es posible, aún mucho mejor.

Visitas a grandes ciudades como Cancún, Morelia, Cuernavaca, Veracruz y Oaxaca, así como a otras mucho más pequeñas como San Andrés Tuxtla y Catemaco, me enriquecieron para pensar en nuevas expectativas. Concluir algunos proyectos e iniciar otros son también motivo de gran satisfacción, esencialmente por la participación de mis alumnos, que sin ellos no sería posible hacer tantas cosas. Tener la oportunidad de enriquecer a alumnos y colegas, y al mismo tiempo enriquecerme de ellos, es una experiencia única porque se generan sinergias en las que todos crecemos.

Tuve la fortuna de romper vínculos formales y convertirlos en vínculos de amistad para incrementar mi lista de amigos. Desde luego el compartir tiempo con familiares es otro factor de peso que es imposible omitir.

Lo más relevante me ocurrió la noche del 19 de septiembre. Fue una fecha muy especial que dejó huella por la simple y sencilla razón de que me liberé de muchas cadenas y, al mismo tiempo, conocí una frase que me retroalimentó: “vivamos lo que tengamos que vivir”. Esta frase fue como une lección de vida, como un refuerzo a la liberación de las cosas que se quedan como un lastre.

Hoy concluye el año del búfalo que según los chinos, representa la prosperidad. Personalmente, aún con la “crisis”, este año fue muy próspero para mi.

¡Kisempakkayotl para todos!

domingo, 27 de diciembre de 2009

Marte: la incubadora de vida más probable

¿Se imaginan a Marte con mares y vegetación? ¿Cómo se vería el monte Olimpia, el más alto del sistema solar con más de 24 kilómetros, con sus capas de hielo y ríos a su alrededor? Hacer que el sitlaltsitsimitl chichiltik sea imagen y semejanza de la Tierra es un gran desafío de la ingeniería. Hace algunos años, con motivo del año 2000, se dio a conocer el proyecto donde se plantea convertir a Marte en una alternativa de vida para la raza humana.

El impuso principal de esto radica en que Marte tuvo agua, las capas polares que tiene lo prueban y se estima que están compuestas de dióxido de carbono y agua, además de variar su tamaño de acuerdo a las estaciones del año marciano. Otra evidencia de que hubo agua son los vestigios de ríos que se encuentran en gran parte de la superficie del planeta.

Aunque se cree que Marte no pudo retener su atmósfera debido a su tamaño, que es la mitad del de la Tierra, y aún y cuando su superficie es un gran desierto de óxido de hierro, la idea de restablecer una atmósfera en Marte es tentadora. El plan consiste en: (1) Enviar a colonizadores con equipo para construir generadores de dióxido de carbono y provocar un calentamiento del planeta, lo cual ofrecerá las condiciones para restablecer la atmósfera requerida. (2) Con dicho calentamiento, las capas polares se derretirán liberando más dióxido de carbono y el agua contenida, lo cual generará mares. (3) Las lluvias generadas por este proceso permitirán la forestación del planeta y (4) la atmósfera podrá ser respirable.

El tiempo estimado para todo el proyecto se calcula en no menos de mil años. ¡Órale! Primero quiero ver que lleguen a Marte, que según los cálculos, el viaje durará aproximadamente un año.

No dudo que el proyecto sea realizable en un determinado momento, pero... ¿Porqué no mejor dedicarle semejante esfuerzo a nuestro planeta para preservar los ecosistemas? ¿Será más fácil cambiar de planeta porque en el que vivimos ya no será habitable para nosotros? o será que... ¿Es más fácil pensar en una nueva raza humana y en un planeta diferente, porque la de la Tierra está tan viciada que no hay remedio?

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Traducciones y el significado de las cosas

Hace algunos meses me encontré una cita que me gustó bastante y al mismo tiempo me llamó mucho la atención. Dicha cita es del Bardo de Avon (más conocido como William Shakespeare) y dice así:

What’s in a name?
That which we call a rose
By any other name
Would smell as sweet


¿Y qué dice? El anglitlajtoli tal vez sea fácil, tal vez muy complicado, pero a veces se tienen dificultades para hacer una traducción adecuada. Hice una y la comparto:

¿Qué encierra un nombre?
Lo que llamamos rosa
Con cualquier otro nombre
Tendría el mismo dulce aroma


Sé que muchos dirán que hay cosas que no encajan y que tal vez haya algo adicional. Ese es el punto, el significado de las cosas en el contexto del idioma y del dominio al cual va dirigido. Muchos podrían llegar a lo siguiente:

¿Qué hay en un nombre?
Eso que llamamos una rosa
Por cualquier otro nombre
Tendría el mismo aroma

Pareciera más acertado, pero no concuerdo con esta traducción porque omite parte del significado. El decir “¿Qué hay en...?” a mi parecer se refiere solo a lo que contiene algo, pero si decimos “¿Qué encierra...?” no solo es qué contiene, sino además sobresale el significado como un todo.

“Lo que llamamos” y “Eso que llamamos” me parecen equivalentes, no hay mayor complicación. “Con cualquier” y “Por cualquier” tienen implicaciones semánticas en nuestro idioma: “con” denota el medio mientras que “por” denota la causa (¡vaya que nuestro jispantlajtoli es complicado!). Finalmente, la última línea es tal vez la más controversial porque en nuestro caso hay que agregar algo para darle sentido a la frase. Literalmente: “olería tan dulce” pero suena mejor: “tendría un aroma tan dulce”.

Este es solo un ejemplo de entre miles que nos podemos encontrar en nuestras actividades cotidianas. Considero que la traducción es un arte y no basta saber el significado de las palabras y frases, es necesario considerar el significado semántico (a veces hasta el significado pragmático) y el contexto de la idea tanto en nuestro idioma como en el idioma extranjero. Al respecto, termino con lo siguiente: si en español estamos mal (aún con una buena preparación universitaria), la traducción a veces se vuelve inalcanzable.

Personalmente, no me dedico a la traducción, leo y escribo algunas cosas técnicas en anglitlajtoli y considero que me falta aún mucho, pero mucho para sentirme confortable en estas actividades.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Sitlaltsitsimitl Tierra: siempre hacia un equilibrio

A lo largo de varios miles de miles años, la Tierra ha experimentado diferentes catástrofes con diversas consecuencias. El propio origen de la vida, la evolución de las especies, la riqueza natural de los ecosistemas en cada una de sus eras y nuestra propia aparición, son solo algunas de dichas consecuencias.

Actualmente, mucho se comenta y se estudia sobre el calentamiento de nuestro sitlaltsitsimitl Tierra. Temblores, maremotos, el niño, la niña, sequías, inundaciones, calentamiento global y nuestro futuro, son algunos de los temas en cuestión. Como consecuencia, los consejos y recomendaciones van desde separar y tirar la basura de forma adecuada, hasta evitar la tala de los árboles y disminuir contaminantes atmosféricos, entre muchas otras cosas. Pero me pregunto: ¿Estos cambios climáticos a nivel planeta harán que la Tierra sea insalvable? Me parece que tenemos una percepción equivocada o muy equivocada. Veamos.

De acuerdo con las investigaciones acerca de los cambios climáticos a lo largo de toda la vida del planeta, estamos en el tercer período más frío. La gran mayoría de las especies siempre han estado en climas más calurosos y de mayor humedad. Por otro lado, los registros acerca de las grandes catástrofes, incluyendo al meteorito impactado en Yucatán que acabó con los dinosaurios, indican que la Tierra siempre ha encontrado un nuevo equilibrio. La Tierra siempre se ha aliviado de cosas extremas, siempre ha dado origen a nuevas especies, independientemente de la magnitud del desastre. ¿Entonces de qué nos preocupamos? ¿Realmente nos interesa salvar a la Tierra cuando ella misma sin la ayuda del ser humano (que no existía) siempre ha ofrecido grandes maravillas de evolución?

Creo que no debemos engañarnos escudándonos y poniendo como pretexto a nuestro planeta. El planeta siempre estará bien con o sin la presencia de la raza humana. Lo que realmente estamos haciendo es protegernos a nosotros mismos de nuestra propia extinción. Estamos inmersos en una agonía que apenas hasta años recientes se le tomó un poco de atención.

Pero aún hay algo adicional. Si nos tocó estar presentes como especie en este tercer período más frío, no nos debería extrañar que por consecuencia el planeta inicie nuevamente un período de calentamiento (con o sin contaminación y efecto invernadero) que por características propias es inevitable. ¿Podemos hacer algo al respecto cuando el planeta casi siempre ha estado a una mayor temperatura? ¿Podemos hacer algo como especie para controlar la naturaleza de un planeta?

Más aún, se sabe perfectamente que el ser humano como especie no tiene garantizada su existencia, no tiene futuro, incluso ni siquiera figura como una especie que pueda adaptarse para evolucionar y convertirse en otra especie. ¿Entonces que estamos haciendo jugando a conservar el planeta? ¿Pérdida de tiempo (o pretexto para no anunciar nuestro propio fin)?

Solo quiero aclarar que el esfuerzo de preservar lo más estable posible a los ecosistemas y garantizar la disponibilidad de recursos naturales es por nuestro propio bien. Dependemos de ellos como especie. Este esfuerzo es en esencia para nosotros. ¿Ustedes que opinan?

¡ Nuestro sitlaltsitsimitl Tierra está y siempre estará bien !

viernes, 13 de noviembre de 2009

América es desde Alaska hasta Argentina

Durante años he escuchado a mucha gente decir “los americanos” y “los norteamericanos” para referirse exclusivamente a los estadounidenses. Me pregunto: ¿acaso usamos la palabra “europeo” para hablar específicamente de un danés, polaco o finlandés? Claro que no. Entonces, por lógica, un americano es cualquier persona nacida en cualquier país de América.

Por otro lado, la división política de América es bastante clara: América del Norte o Norteamérica (conformada por México, Estados Unidos y Canadá), América Central y América del Sur o Sudamérica. Hago énfasis en los países de Norteamérica porque es otro punto en cuestión. Por analogía, cualquier persona nacida en alguno de estos tres países es una persona norteamericana.

Desafortunadamente, hemos caído en el juego macabro de expresarle al mundo que sólo los estadounidenses son América. Hasta donde he podido averiguar, el término “americano” para referirse específicamente a un gringo viene de la época de las 13 colonias, donde todo europeo recién llegado a esta parte del continente expresaba: “Esto es América”. Cuando algunos regresaban a Europa, decían que eran americanos y así se quedó, como costumbre.

Resumiendo, y por división política, todo mexicano es un americano y un norteamericano, y cualquier latinoamericano es un americano. Aunque nos cueste trabajo, hay que romper este vicio en nuestras expresiones.

lunes, 9 de noviembre de 2009

El pasado es referencia, no residencia

Esta es una frase que me agrada bastante, dice mucho acerca de lo que casi nadie comprende o quiere aceptar. Generalmente vivimos en la residencia del pasado y nos negamos a salir de ella para admirar el gran paisaje de los alrededores (las personas del presente), los grandes bosques (las oportunidades que se nos van a cada instante), el canto de las aves (quienes nos quieren, admiran y dan consejos que nos negamos a escuchar) y el mágico sonido de los grandes ríos (los motivos que nos encausan a nuevas realizaciones).

Lo anterior es mi interpretación personal y coincido en que las experiencias del pasado deberían ser solo eso: experiencias y puntos de referencia para mejorar, no para empeorar o estancarse. Creo que no es necesario decir más.

¡ Libérate de tu tepostik !

sábado, 31 de octubre de 2009

El semanauak elegante

Hace aproximadamente un año, un gran amigo me prestó un libro bastante interesante llamado El Universo Elegante de Brian Greene. Como sabrán, soy apasionado por las cosas del universo, desde el macro hasta el micro cosmos (aunque lo de micro sigue siendo muy grande). Este libro lo tuve que leer en un mes debido a mi ansiedad bastante fuerte e inquietante por saber “todo” lo que allí estaba escrito.

El resultado fue bastante placentero: corroboré que es factible viajar en el tiempo y sólo al futuro, que potencialmente puedo atravesar paredes o cualquier otra cosa, que vivo en uno de tantos universos inmersos en un multiverso, que siempre habrá muchos big-bangs, que la gravedad está formada por partículas de masa cero, que al menos tenemos 10 dimensiones espaciales y una temporal, que hay cosas raras de 6 dimensiones conocidas como Espacios de Calabi-Yau (que por cierto parecen fractales), entre muchas otras cosas interesantes.

Les dejo los tres videos que resumen el libro, aunque de cualquier forma les recomiendo leerlo ya que como en toda película, se quedan cortos en comparación con las excelentes explicaciones del libro.

Parte 1



Parte 2



Parte 3



El tegogolo y el topote en Tochtlan

Los curiosos nombres de tegogolo y topote los conocí esta semana en una visita rápida a Catemaco. No, no vine a buscar brujos, aunque estos andan muy ocupados por el próximo día de muertos. El tegogolo es un caracol endémico de esta zona, pero como todos los peces y moluscos comestibles, tiene problemas de población por su consumo no controlado. Sospecho, no me crean, pero supongo que el nombre de tegogolo proviene de atekokoli (caracol). El topote es una especie de charal pero un poco más grande, es bastante rico y también muy popular en la zona.

Esta zona de Catemaco, junto con la de San Andrés y Santiago se conocen como Los Tuxtlas y supe que este nombre proviene de la palabra náhuatl tochtlan que significa “lugar junto a los conejos”. Y toda la zona de Tochtlan tiene desde partes lluviosas hasta partes muy calurosas con alta humedad. Esta zona es una verdadera maravilla de la naturaleza que recomiendo ampliamente para visitar y relajarse por completo. Pueden disfrutar de un gran lago en Catemaco hasta una cascada bastante interesante conocida como Salto de Eyipantla, lugar donde se filmó una parte de la película Apocalipto.

martes, 27 de octubre de 2009

Temachtli: un gran reto entre las personas

Este sábado 24 pasé una velada muy agradable en compañía de dos excelentes personas. Entre las múltiples cosas que se platicaron, apareció el tema de la gente insegura y la desconfianza, principalmente aquella que se da entre una pareja, sean novios o estén casados.

¿Cómo se puede confiar en una persona? Simple: solo se trata de COMUNICACIÓN. Lo malo es que no sabemos comunicarnos, ni somos capaces de hablar con la verdad o caemos en el clásico "no pasa nada" o "no es importante". Esto es consecuencia de cómo nos educaron, las carencias que tuvimos y de cómo afrontamos (¿o evadimos?) nuestros miedos y nuestras ansiedades (en cualquier contexto).

Si desde un principio jugamos a la confianza, mas que desarrollarla, entonces estamos perdidos. Los celos, un tipo de miedo mezclado con ansiedad son una combinación no deseable (¡dinamita pura!), de hecho me pregunto: ¿cuantas personas no son celosas? Esta es una de las preguntas de los 64,000. Y las cosas se complican más si a esto le agregamos un toque de lo que algunos llaman "mente abierta" y una de las partes no coincide con esto. ¡Olvídenlo!

En fin, no quiero entrar en mundo polémico, solo dejo de manifiesto que todos manejamos miedo y ansiedad, dos motores esenciales en la toma de decisiones. Y finalmente dejo dos preguntas para todo lector: ¿Sabes confiar? ¿Eres confiable? Esto es quizás el más grande reto entre las personas.

jueves, 15 de octubre de 2009

Nuestro deporte nacional

¿Alguna vez se han preguntado cuál es nuestro deporte nacional? Así es, México tiene un deporte propio que seguramente nadie se ha imaginado cuál es, excepto por algunas muy raras excepciones (aunque es muy conocido).

Durante algunos años he preguntado a algunas personas si conocen a cerca de esto, pero la respuesta cae generalmente en dos categorías: la mayoría dice que el fútbol y la minoría no sabe o menciona algún otro deporte. Es muy interesante el fenómeno porque tal vez podemos saber muchas cosas extranjeras, pero nunca nos ponemos a pensar en lo nacional. Algunos se han de imaginar que el juego de pelota de nuestros antecesores es nuestro deporte nacional, pero no, respuesta equivocada. El juego de pelota solo se ha quedado como un ritual que según algunos historiadores, proviene desde la cultura madre: los olmecas. Pero entonces, ¿cuál es nuestro deporte nacional?

Nuestro deporte nacional tiene que ver esencialmente con caballos. ¿Cómo? Sí, todo relacionado a la equitación. Existe una feria que toma este deporte como parte esencial de sus festejos y lo promueve ampliamente. Se celebra año con año en el estado de Hidalgo y en estos meses de octubre y noviembre se lleva a cabo: la Feria de Pachuca. Pero este deporte no es exclusivo de esta feria, es tradicional de muchas ferias y celebraciones. ¿Aún no adivinan cuál es? Pues bien, el deporte nacional en México es: La Charrería. Y por si no lo sabían, existe la Federación Mexicana de Charrería.

¿Sorprendidos? No lo sé, pero la realidad es que el mexicano sabe más de lo ajeno que de lo propio. Lamentable, muy lamentable.

¡ Practica un momotlalistli o auiltikayotl !

miércoles, 14 de octubre de 2009

Cosas insignificantes

¿Cuántas veces se han encontrado algo en la calle, en la escuela, en el trabajo, en la propia casa, etc. y pensamos que eso no tiene mayor importancia? ¿Cuántas veces creemos que algo es tan importante cuando no es así? ¿Cómo sabemos el valor de las cosas?

El oro es muy valioso, no porque sea buen conductor de la electricidad, ni porque sea muy pesado (19.3 kilos por litro), o porque antes se encontraba como rizos entre las piedras. No, el oro es valioso porque “se ve bonito y brilla”, se convierte en acuerdo entre la gente y como tal es el valor que nosotros le damos. ¿Cuánto vale una moneda vieja que te encuentras? Si tienes algunos millones, tal vez ni la percibas, si ganas un salario mínimo y tienes 5 hijos y además tu esposa está enferma, seguro que es invaluable para tu economía.

Cada cosa tiene una historia, que seguro puede ser de lo más irrelevante, o tal vez, llena de grandes logros. No se sabe. Pero, ¿cuánto vale una palabra de afecto, una sonrisa, una caricia, una mirada? Esas cosas que a veces olvidamos, que consideramos no esenciales para vivir, son las que tal vez te salven la vida, o por lo menos te hacen vivir...

“A veces lo esencial pasa desapercibido”

miércoles, 7 de octubre de 2009

Pixkitl, luego entonces llega kuitlaxokotl

El trabajo diario, el esfuerzo que implica para que todo salga bien y sobre todo hacer las cosas bien a la primera, es una responsabilidad muy grande. Y si hablamos de la responsabilidad de facilitar el conocimiento para formar a otras personas, el compromiso es aún mayor.

En enero de este año tuve la oportunidad de formar a un grupo de jóvenes durante un semestre de propedéutico. Los afortunados en acreditarlo están cursando la maestría y desde finales de agosto nuevamente estoy compartiendo tiempo con ellos. Esto me permite dar continuidad a la formación previa y seguirlos adiestrando para que sean exitosos. Es la segunda vez que puedo darle continuidad a un grupo y cuyos cursos, por primera vez, son complementarios con una línea bien definida. Hace tres semanas los estudiantes hicieron presentaciones de trabajos que les dejé y los resultados fueron más que interesantes.

Al término de cada una de las presentaciones, la sesión de preguntas y dudas se convirtió en una sesión de defensa de puntos de vista, de cuestionamientos fuertes acerca del porqué y para qué de cada tema, de justificar con todo lo que conocen y destacando principalmente que ambas partes, la de la audiencia y la de los expositores, saben bastante del tema. Me sentí como en un congreso de expertos. Disfruté de ver la calidad de las exposiciones, de saber que ellos saben del tema, que cada estudiante aportó un granito de arena valioso, que han desarrollado un criterio, que pueden cuestionar y no se les puede engañar.

Mi esfuerzo valió la pena. Al estilo del séptimo arte, por primera vez pude contemplar “la versión del director” de mi propia dirección de película.

¡ Mauitsoa tlakamej !

viernes, 2 de octubre de 2009

La piel de koatl

A principios de año me fui a presentar un trabajo a la Ciudad de Nido de Serpientes, en el paradisíaco estado de Quintana Roo. En un pequeño rato de distracción me encontré con todo tipo de distracciones, pero hubo una que fue inevitable. Me encontré con una rubia que por su belleza hasta me ponía nervioso.

Después de observarla un rato, y con todo el valor del mundo decidí tomarme unas fotos con ella. De hecho la tuve que cargar, ya que fue la condición que me puso para salir en la foto. Lo bueno es que estaba en excelentes condiciones físicas (y mentales). La rubia fue muy amable y después de sentirme en confianza le di las gracias por compartir unos momentos a mi lado. Fue una experiencia muy interesante y les dejo estas fotos para que lo constaten.






Les puedo comentar que la piel de víbora es tersa, aún y cuando posee escamas, su temperatura es ligeramente menor a la nuestra y son bastante pesadas. Este maravilloso ejemplar pesaba 15 kilos y parece fácil cargarla, pero no, hay que saberla equilibrar si no se te cae (resulta que no eres árbol para que ella se equilibre), y si le suman cierto nerviosismo, todo se complica. Nunca pensé en sentir la piel de víbora junto a la mía.

jueves, 1 de octubre de 2009

Axkankayotl: la muralla en que vivimos atrapados

Seguramente muchos recordarán una excelente canción de rock en tu idioma: La Muralla de los Enanitos Verdes. Hay quienes le llaman La Muralla Verde, pero eso es lo de menos. A los pocos años de haber aparecido como éxito, me llamó la atención la letra, la cual nunca me interesó porque solo me contagiaba con el ritmo de la pieza. Pero me di cuenta que la letra tiene matices filosóficos. ¿A qué me refiero? Transcribo los siguientes fragmentos:

Estoy parado sobre la muralla que divide
todo lo que fue de lo que será.
Estoy mirando como aquellas viejas ilusiones
pasando la muralla se hacen realidad.
Estoy parado sobre la muralla que divide
todo lo que amé de lo que amaré.

Estas frases hacen alusión al presente que todos vivimos y que nunca podremos salirnos de la Muralla, atrapados a vivir lo que percibimos y destinados a disfrutar sólo el instante que tenemos. No nos será posible salir, porque ir al pasado o al futuro implica desaparecer.

Pero la Muralla tiene un espesor. Dicen los que se han dedicado a definir qué cosa es el presente, que nuestro cerebro lo percibe como un espacio recreado a partir del recuerdo inmediato de nuestro pasado, el cual consta de aproximadamente unos 10 segundos. Desde luego que, físicamente es un instante que no podemos medir, pero nuestro cerebro es tan ingenioso que hace que tenga sentido.

El presente es tan especial e importante en nuestras vidas que tiene implicaciones no solo filosóficas, hasta cuestiones sociales y políticas se encuentran involucradas y movimientos como el Presentismo aparecen en escena, entre muchas otras cosas. Por el momento solo quiero dejar plasmada mi percepción.

Tenamitl, tenamitl, tenamitl...

domingo, 27 de septiembre de 2009

Una visita a mi Alma Mater

Este viernes fui a visitar a uno de mis amigos a Zacatenco. Dejé mi coche por alguna calle de Lindavista y entré por la ahora llamada Plaza Roja. Para quienes no sepan, esta plaza es la explanada donde se encuentra Lázaro Cárdenas, entre el famoso “Queso” (el Centro Cultural Jaime Torres Bodet) y un edificio reestructurado que alberga a la biblioteca. ¡Que bien se siente caminar por los pasillos de la unidad! Recordando cuando era estudiante, viendo cómo casi todo permanece igual, las cafeterías, los estacionamientos... vaya que tiempos gloriosos, como dicen: recordar es volver a vivir.

Recuerdo que todos nos sentíamos amos y dueños del universo, queriéndonos comer al mundo y pensando que nada nos podría detener. Y literalmente sigue siendo así, solo que en un contexto diferente.

Pero lo más importante de esta pequeña visita es que parece que el tiempo se detuvo. Entrar a los Laboratorios Pesados de Ingeniería Metalúrgica y percibir el clásico olor de minerales, fundición, materiales diversos de la metalurgia... ¡Cómo recuerdo mis tardes con mi molino para mezclar cobalto y molibdeno en polvo, todo para mi tesis! Era como jugar con lodo, ¡pero sin agua! Suena curioso, pero así era. Pasaba largas horas de espera en un difractómetro de rayos X para analizar mis aleaciones y medir la cantidad de energía acumulada en el proceso de molienda, utilizar el planímetro para obtener áreas... Recuerdo algunos descuidos como un día cuando dejé prendida mi bomba de vacío y estando en casa brinqué como chapulín para llamar por teléfono y asegurarme de que todo estuviera en orden, sin algún posible incendio o casas por el estilo. Hasta el difractómetro un día también lo dejé prendido y ya me imaginaba pagando algunos milloncitos de pesos por semejante aparato.

Lamentablemente, ahora parece que la educación sigue bajando de calidad, según lo que me enteré y es muy triste. ¡Mientras tanto me quedo con el grato sabor de mis tiempos de estudiante!

Tlamatilistli

viernes, 25 de septiembre de 2009

El precio de Ser, Hacer y Tener

¿Cuánta gente no logra lo que quiere por tomar decisiones equivocadas? ¿Cuántas personas caen en el clásico “hubiera”?

El ser humano está destinado a tomar decisiones en todo momento. Por las facultades que tiene, por ser racional, por ser pasivo o reactivo o proactivo, por lo que gustes y mandes. Lo más curioso es que independientemente de la decisión, casi todos somos incongruentes. Vaya problema, ¿cómo se llega a eso? Es muy sencillo: porque así nos lo hacen creer. Y para prueba basta un botón: ¿porqué lloras cuando eres feliz? ¿No es acaso una incongruencia?

En la gran mayoría de los casos, una persona quiere “tener” para “hacer” cosas que le permitan “ser” alguien importante (de acuerdo a su contexto). Un ejemplo es: “quiero tener dinero para hacer grandes cosas y ser importante”. ¡FALSO! ¡INCONGRUENTE! Date cuenta del gran error, es una incongruencia total (sí, aunque ya lo haya dicho y sea redundante). ¿Cuántas personas lo tienen todo y no son nada? ¿Cuántas personas hacen grandes cosas y son completos desconocidos? Pero ¿cuántas personas son de lo más sencillo que te puedas imaginar y tienen grandes cosas? ¡Ah, eso es impactante!

Una persona “es” por sus valores (los que quieran ponerle a esa persona). De acuerdo a esos valores, moldeados por la familia, la sociedad, la educación, etc., son sus valores y lo definen como tal. Estos valores (nuevamente, según el contexto) son los que en un principio la harán hacer las cosas que cree son importantes o que al menos, les da prioridad. La consecuencia de esas acciones será el resultado de lo que obtendrá, tangible o intangiblemente.

Este ciclo de Ser, Hacer y por consecuencia Tener, es el precio que pagamos cada uno de nosotros al tomar una decisión. Sea cualquier decisión, de cualquier índole, bajo cualquier circunstancia, con respecto a quien sea, es el precio a pagar. ¿Y cuál es ese precio? Lo que OBTIENES. Pero no se vale arrepentirse porque TÚ ASÍ LO DECIDISTE.

En el mundo del desarrollo humano ésta es una ley inviolable, y cuando eres consciente de ello, al menos podrás saber qué tan incongruente o congruente has sido en tu vida, aunque tal vez tomes la decisión de “no hacer nada” o tomes la decisión de pensar que “no es cierto porque yo soy diferente” o peor aún, que tomes la decisión de creer que “eso no es para mí”. Incluso podrás tomar la decisión de ya no seguir leyendo.

Sé congruente, NO TE CONTRADIGAS. Aprende a conocerte, NO TE OLVIDES DE TI. Sé consciente del precio a pagar: tu felicidad o tu tristeza. Solo tú tienes en tus manos la felicidad, NO TE LIMITES. Recuerda: todo en la vida tiene un precio, el precio de Ser-Hacer-Tener (en ese orden, no hay otro aunque quieras), el precio de ser congruente en tu vida.

Finalmente, esto que hoy he compartido lo aprendí hace unos 6 años, y puedo decirles que me ha servido muchísimo. Liberarse tomando mejores decisiones es algo invaluable para mí. Pero esto no lo es todo, es solo la punta del iceberg.

¡ Papaqui !

Una noche de septiembre en Pluviosilla, pero del año 2008

La ciudad, aunque pequeña, llena de tráfico. Eso me recuerda algo mucho más grande, pero por el momento es interesante ver algo no común: calles saturadas, todos desesperados, claxonazos por doquier... la noche se hace más intensa, la gente caminando por todos lados y yo rumbo a la terminal y... ¡demasiada gente! Pensé un momento y llegué a la conclusión que todo este relajo es por las festividades patrias. Hoy es día 9, aproximadamente como a las 21 horas.

Después de 1 hora formado, de regreso al departamento. Pero parece que todo mundo está haciendo carnes asadas, el agradable olor llega constante y entre las luces del alumbrado público se ve la nube del asadero... ¿pero tanta carne se está preparando como para que se vea tanta nube? ¡Oh! Ya veo... La neblina está bajando, no es la carne asada...

Caminando entre la neblina solo se ven sombras, se sabe que viene un coche porque trae las luces encendidas, una que otra persona se ve a lo lejos, no, esperen ¿lejos? No es lejos, a media cuadra ya no se distingue mas que solo sombras caminando...

jueves, 24 de septiembre de 2009

Un mundo lleno de contradicciones

Era un día de noche, cuando el sol con sus rayos ardientes... ¡helaba la tierra! De pronto, al ir caminando con dos de mis compañeros yo solo sentado en una piedra de madera, tropecé con el cadáver de un ser viviente. Y sacando mi cuchillo que no tenía ni cacha ni filo, le di dos tremendas puñaladas y el muerto me contestó: “¡hay! me mataste pero a traición”.

Hace mucho tiempo, cuando era niño, mi mamá me contó esta historia para entretenerme. La he recordado siempre, desde la primera vez se quedó grabada en mis pensamientos. Hasta donde sé, a ella se la contó una amiga de la escuela. Hoy la comparto para todo el mundo.

¿Será que este mundo en que vivimos tiene algo (o mucho) que ver con esta historia?

Peualistli

Todo tiene un comienzo y una razón de ser. No es "casualidad" iniciar un blog, es una "causalidad" que obedece a ciertas inquietudes. Las mías: compartir y crecer.

¡Allá voy!